El año pasado en este espacio y en relación a la NFL dediqué un texto a hablar de algunos jugadores que pensaba tendrían una actuación destacada durante la temporada 2006, particularmente sobre los QB novatos que serían titulares de sus equipos antes de que terminase la temporada. He de mencionar que acerté con todos y cada uno de esos QB, pues todos ellos salieron el pasado domingo al campo a comandar el ataque de sus equipos. Este año no hay tantas expectativas por ver jugar a los QB novatos pues, para fines prácticos, solo dos fueron seleccionados en la primera ronda del draft colegial, Jamarcus Russell, quien formará parte de los Raiders de Oakland, y Brady Quinn, ahora integrante de los Cafés de Cleveland.
Jamarcus Russell podría convertirse en un precedente en cuanto a la forma en que se manejan los contratos de las principales selecciones colegiales, pues a pesar de que hace varias semanas que existe un acuerdo entre él y los Raiders, Russell aún no firma su contrato. No se presentó al campamento de entrenamiento y por tanto no participó en ninguno de los 4 juegos de pretemporada del equipo. Aparentemente Russell pretende que su dinero le sea entregado en una sola exhibición y a manera de bono contractual, lo que fiscalmente podría representar complicaciones para el equipo además de lo que representa desembolsar una fuerte suma de dinero de un solo golpe. Al Davis ha dicho que no le preocupa en lo más mínimo y que de ningún modo piensa ceder a los deseos de Russell, pues ello implicaría enviar el mensaje equivocado a futuras generaciones de jugadores. El equipo se hizo con los servicios de un par de QB en la agencia libre, Josh McCown, proveniente de los Leones de Detroit y quien tuviera un buen año hace un par de temporadas con los Cardenales de Arizona antes de que neciamente Dennis Green lo sustituyera con Kurt Warner; y Dante Culpepper, quien el año pasado viera su campaña con los Delfines de Miami truncada por una lesión en la rodilla y cuyos mejores años fueron jugando para los Vikingos de Minnesota.
En cuanto a Quinn, es solo cuestión de tiempo antes de que se haga cargo del ataque de los Cafés, pues el domingo pasado quedó en evidencia que ni Charlie Frye ni Derek Anderson están a la altura de lo que debe ser un QB titular de la NFL, y la presión sobre Rommeo Crennel solo se incrementará con el paso de las semanas en lo que es la última campaña de su contrato como entrenador en jefe de los Cafés. Quinn participó únicamente en la segunda mitad del campamento de pretemporada y vio acción en el segundo medio de dos de los juegos de preparación, mostrando el potencial que tiene para convertirse en una futura estrella de la liga. Crennel fue cuestionado al final del partido del domingo sobre porque no había usado a Quinn en el segundo medio, a lo que respondió que se está tomando con seriedad el desarrollo del joven QB y que no tenías ningún caso enviarlo al matadero en un juego que ya era insalvable y donde se hubiera enfrentado a una de las defensivas más agresivas de la liga y reconocida por la gran variedad de variantes utilizadas para presionar a los QBs rivales.
De esta generación de novatos a la ofensiva me llaman mucho la atención un par de corredores y un receptor abierto. Marshawn Lynch debutó el domingo con los Bills de Buffalo enfrentando a los Broncos de Denver, equipo al que normalmente es difícil correr el balón, y tuvo una destacada actuación, totalizando 90 yardas en 19 acarreos y anotando un touchdown. Sin duda dará de que hablar conforme avancen las semanas y se vaya sintiendo más cómodo en su posición. El otro corredor que me llamó la atención fue Adrian Peterson, de los Vikingos de Minnesota, quien corrió para 103 yardas en 19 acarreos y recibió un pase de anotación. El otro corredor de los Vikingos, Chester Taylor, está lesionado, así que no sería extraño ver a Peterson tomar el balón con mayor frecuencia en las próximas semanas. El receptor abierto de los Leones de Detroit, Calvin Johnson, fue una de las armas principales de su equipo el pasado domingo cuando derrotaron a los Raiders de Oakland. Johnson, quien mide más de 1.90, se convertirá en una pieza importante del esquema ofensivo de los Leones, quienes buscan su primera temporada no perdedora en muchos años.
Finalmente, a la defensiva, la verdad es que no he tenido oportunidad de ver a muchos de los novatos, pero a quien si vi y me causó una grata impresión fue al linebacker de los 49ers de San Francisco, Patrick Willis. Durante el juego del lunes contra los Cardenales de Arizona, Willis tuvo 11 tacleadas, 9 de ellas en solitario, lo que lo coloca como uno de los líderes de la liga en esa categoría. Rápido, fuerte, y con buenos instintos para defender la carrera o presionar al QB rival, Willis tiene todo para convertirse en uno de los mejores linebackers interiores de la liga y se convierte en una importante adición al de por si sólido grupo de linebackers de los 49ers. Imagino que teniendo como asistente del entrenador en jefe al legendario linebacker de los Osos de Chicago de los 80s, Mike Singletary, no debiera sorprender a nadie que por segundo año consecutivo San Francisco tomase a un linebacker en la primera ronda del draft, pues el año pasado su primera selección fue el linebacker exterior Manny Lawson, quien tuvo una gran campaña el año pasado y de quien se espera un desempeño aún mejor para esta temporada.
En fin, hoy y mañana se juega la segunda jornada de la liga. Habrá que ver como se desempeñan los novatos arriba mencionados y si es que algún otro se hace notar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
¿Opiniones, quejas, comentarios?