diciembre 31, 2007

Meme 2007

Hace algunos días "Camila" (creo que ya no es secreto, pero no estoy en libertad de revelar su verdadera identidad) publicó en su blog un cuestionario sobre el 2007 que me pareció adecuado para estas fechas pues ofrece la oportunidad de echar un último vistazo atrás...

1) ¿Dónde empezaste el 2007?
En la sala de mi casa, esperando que estuviese lista la cena de Año Nuevo.

2) ¿Cuál fue tu status el 14 de febrero?
Soltero.

3) ¿Estuviste en la escuela este año?
No.

4) ¿Cómo ganabas dinero?
Trabajando, igual que siempre.

5) ¿Tuviste que ir al hospital?
Tanto como tener que ir no, aunque acudí en dos ocasiones al banco de sangre del ABC.

6) ¿Tuviste algún encuentro con la policía?
Si, hace algunas semanas por causas ajenas a mi, pero prefiero no entrar en detalles...

7) A dónde fuiste de vacaciones?
Hace bastante tiempo que no salgo a ninguna parte.

8) ¿Compraste algo con un valor de más de 10,000 pesos?
No.

9) ¿Conoces a alguien que se haya casado?
Si.

10) ¿Alguien falleció?
Afortunadamente no.

11) Te mudaste a algún lado?
No.

12) A cuantos conciertos fuiste?
A ninguno. La garganta de Roger Daltrey no lo permitió.

13) Describe tu cumpleaños.
Pues en realidad fue un día como cualquier otro.

14) ¿Cuál fue la cosa que nunca pensaste hacer en el 2007?
Mmm... no lo sé... probablemente tendría que ver con el encuentro con los agentes de la ley mencionado más arriba...

15) ¿Y tu momento favorito?
No se me ocurre ninguno en particular.

16) ¿Qué has aprendido acerca de ti?
Que cada día que pasa soy un poco más cínico y que mis convicciones, puestas a prueba más de una vez en los últimos meses, son tan firmes como pudiera desear.

17) ¿Alguna nueva adición a la familia?
No.

18.) El peor mes
Noviembre.

19.) El soundtrack del 2007:
Este año le volvía agarrar el gusto al heavy metal, al punk rock y al grunge... no pregunten.

20) ¿Quién fue tu mejor amigo de pedas?
Creo (y esto va a escandalizar a algunas personas que me conocen) que este año ingerí aún menos alcohol que en otros años...

21) Nuevos amigos?
No.

22) Nuevo mejor amigo?
Tampoco.

23) Fiesta favorita?
¿Fiesta? Diantres... estos memes hacen que mi vida suene tan aburrida...

Pues ahí está... un último vistazo a este año que se acaba mientras nos preparamos para el que viene y aprovecho para extender mis mejores deseos para el 2008.

diciembre 27, 2007

Firefly

Hace algunos días puse por aquí mis resultados de un test de Serenity, la película derivada de la tristemente efímera serie Firefly, y me di cuenta que nunca le dediqué una sola línea ni a la serie ni a la película.

Creada por Joss Whedon, la mente detrás de Buffy The Vampire Slayer y Angel, Firefly era una serie de ciencia ficción que seguía las aventuras de la nave Serenity, un carguero tipo Firefly (Luciérnaga) dedicado al contrabando interplanetario en el siglo XXVI. La Serenity es propiedad de Malcolm "Mal" Reynolds, un veterano de la Guerra Civil; y su tripulación está compuesta por Zoe Washburne, quien sirvió con Mal durante la guerra y es su segunda al mando; Hoban "Wash" Washburne, marido de Zoe y piloto de Serenity; Kaylee Frye, la mecánico encargada de mantener andando la nave; y Jayne Cobb, un mercenario que es el brazo fuerte de la tripulación. Con ellos viaja, sin ser necesariamente parte de la tripulación, Inara Serra, una "compañera", que sería el equivalente a una cortesana medieval, incluídos el status social y respetabilidad que ello representaba.

A lo largo de la serie la tripulación es acompañada en sus aventuras por tres pasajeros, el Dr. Simon Tam, su hermana River -quien originalmente aborda la nave como polizonte- y el pastor Derrial Book. Aún cuando la acción transcurre en el siglo XXVI en otra galaxia, la serie tiene un ambiente que resulta familiar para cualquier aficionado al cine o TV del siglo XX, pues está realizada como si se tratase de un western. Seguramente muchos se preguntarán que tienen en común la ciencia ficción y el viejo Oeste, pero yo no descartaría tan rápido la asociación.

El viejo Oeste siempre ha sido considerado por muchos autores de cf como una adecuada metáfora para la exploración del espacio. Territorios desconocidos y duras condiciones de vida son la norma. No hay forma fácil o rápida de conseguir provisiones y los colonizadores tienen que aprender a valerse únicamente de los recursos que tienen a la mano. La escasez de productos alimenticios, medicinas y otros suplementos, combinada con la explotación de recursos minerales en los nuevos mundos se convierte en el territorio propicio para la aparición de transportistas emprendedores dispuestos a viajar de mundo en mundo transportando mercancías que no siempre son legales. Así que se trata de una analogía perfecta, la cual ya había sido explorada anteriormente. De inmediato se me ocurren dos ejemplos, ambos animados pero de origen y características diferentes: los Galaxy Rangers y Cowboy Bebop. Pero eso sería tema para otra ocasión.

Joss Whedon creó la serie pensando en lo interesante que sería trabajar con personajes en un ambiente de post-guerra, especialmente con los del bando derrotado. Habiendo leído bastante sobre la guerra civil norteamericana y en particular sobre la batalla de Gettysburgh, Whedon decidió partir de ahí para crear Firefly. El resultado fue uno de los programas de ciencia ficción más interesantes y complejos que hayan pasado por la televisión en mucho tiempo. Personajes imperfectos y falibles puestos en situaciones reconocibles ayudaron a crear una rápida identificación de la audiencia con los protagonistas. El ampliamente reconocido trabajo de Whedon para desarrollar personajes humanos y creíbles se puso una vez más de manifiesto en esta serie, la cual nunca recibió el apoyo necesario de los directivos de la cadena televisiva Fox, quienes rechazaron el piloto original y empezaron a transmitir la serie partiendo de un punto diferente al que Whedon y su socio Tim Minear hubiesen deseado.

La serie fue prematuramente cancelada, habiéndose producido únicamente 14 episodios, tres de los cuales permanecieron inéditos durante mucho tiempo, pero ese breve periodo de vida al aire fue suficiente para crear un leal grupo de fans, quienes hicieron toda clase de activismo tratando de hacer que la serie permaneciera en la programación. No fue suficiente. La salida en DVD de la serie con ventas superiores al medio millón de ejemplares fue aliciente suficiente para que Universal Pictures decidiese trabajar con Whedon para producir una película que retomara la historia abandonada con la cancelación de la serie, siendo Serenity el resultado. Pero esa película se merece un poco más de atención que las pocas líneas que pudiera dedicarle en este texto, así que quedará pendiente para otro post.

Nos leemos pronto.

diciembre 26, 2007

NFL: Path to Perfection

El pasado domingo, cuando los Patriotas de Nueva Inglaterra derrotaron a los Delfines de Miami, hicieron algo que ningún otro equipo había hecho jamás: iniciar una temporada con record de 15-0. Claro está que hay algunos detalles que es necesario aclarar en esa afirmación, empezando por el hecho de que hasta 1977 la temporada regular de la NFL constaba únicamente de 14 partidos. Aún así, los Patriotas fueron apenas el segundo equipo en empezar la temporada con 14 victorias consecutivas, hazaña conseguida únicamente por los Delfines de Miami en 1972, cuando luego de acabar la temporada regular 14-0 se impusieron en todos sus duelos de playoffs, convirtiéndose en el único equipo en conseguir un campeonato de manera invicta con un total de 17 victorias sin derrota. Ahora, faltando únicamente una jornada por disputar, los Patriotas vislumbran la posibilidad de completar la temporada regular con un registro perfecto de 16-0.

En el pasado ha habido equipos dominantes que han logrado 15 victorias, pero ninguno de ellos ha completado la hazaña de concluir el año sin derrotas. En 1984 los 49ers de San Francisco terminaron con un record de 15-1 y coronaron su campaña al derrotar a los Delfines de Miami 38-16 en el SuperBowl XIX. En 1985 los Osos de Chicago terminaron con esa misma marca y remataron su año apaleando a los Patriotas de Nueva Inglaterra en el SuperBowl XX por marcador de 46-10. Tanto los 49ers como los Osos concluyeron la campaña con un registro de 18 victorias y solo 1 derrota, convirtiéndose en los equipos más dominantes en la liga desde la campaña del 17-0 de los Delfines.

Solo dos equipos más han conseguido 15 triunfos en temporada regular, los Vikingos de Minnesota en 1998, y los Acereros de Pittsburgh en el 2004. Lamentablemente para su causa, ninguno de esos dos equipos pudo redondear su temporada con un título, y lo que es más, ni siquiera lograron llegar al SuperBowl correspondiente para disputarlo. Los Vikingos fueron derrotados 27-30 en el juego de Campeonato de la Conferencia Nacional por los Halcones de Atlanta, en tanto que los Acereros sucumbieron ante los Patriotas de Nueva Inglaterra por marcador de 27-41 en el juego de Campeonato de la Conferencia Americana.

Otros equipos sobresalientes en términos de ganados y perdidos que vale la pena mencionar son:
  • Los 49ers de San Francisco que en 1990, 1991 y 1992 terminaron la campaña regular con marca de 14-2, convirtiéndose en el único equipo en lograr 14 triunfos durante tres años consecutivos, aunque solo en uno de ellos obtuvieron el Campeonato de la liga.
  • Los Jaguares de Jacksonville en 1999, que lograron también un record de 14-2 y se quedaron a un paso del SuperBowl tras perder el Campeonato de la Conferencia Americana ante el mismo equipo que los derrotó en dos ocasiones en la temporada regular, los Titanes de Tennessee.
  • Los Patriotas de Nueva Inglaterra, quienes hilaron campañas de 14-2 en las temporadas 2003 y 2004, coronando ambas con triunfos en los SuperBowls XXXVIII y XXXIX.
Habrá que esperar el resultado del sábado por la noche, cuando los Patriotas persigan un lugar en la historia del Futbol Americano profesional enfrentando a los Gigantes de Nueva York buscando la ansiada marca de 16-0. También buscarán romper algunos otros records, al menos tres de los cuales son perfectamente alcanzables, pues Tom Brady necesita un pase de anotación para igualar la marca de 49 en un año de Peyton Manning, misma que superaría lanzando más de uno. Randy Moss necesita atrapar uno de esos pases de TD para alcanzar los 22 en una temporada que son la marca de Jerry Rice, y de conseguir 2 o más se convertiría en el líder único de esa categoría. Finalmente, la marca de puntos anotados en una campaña pertenece a los Vikingos de Minnesota, con 556 conseguidos en la temporada de 1998, pero los Patriotas tienen 551, por lo que es de suponer que no habrá nada que impida que superen esa marca.

Sin duda debe tratarse de un gran encuentro y debiera ser la forma ideal para cerrar el año mientras los mejores equipos de la liga intentan llegar en el mejor nivel posible a la postemporada para disputarse el derecho a jugar el SuperBowl XLII.

diciembre 23, 2007

Test: Serenity

Ah, que mejor para dejar atrás el serio post anterior que otro de esos ñoños tests relacionados con algunas de nuestras ficciones favoritas. En esta ocasión se trata de Firefly/Serenity, creación de Joss Whedon y una de las mejores Space Operas que hayan agraciado alguna vez una pantalla sin importar si se trata de TV o cine. Después de responder el cuestionario correspondiente esto fue lo que obtuve por resultado:

Tu eres:
Malcolm Reynolds (Capitán)


Malcolm Reynolds (Capitán) 80%
Dr. Simon Tam (Médico de la nave) 75%
Zoe Washburne (Segunda al mando) 70%
River (Polizonte) 55%
Wash (Piloto de la nave) 55%
Derrial Book (Pastor) 45%
Kaylee Frye (Mecánico de la nave) 40%
Jayne Cobb (Mercenario) 35%
Inara Serra (Escolta) 30%
Alianza 20%
Reaver (Caníbal) 5%

Honesto y defensor de los inocentes. Algunas veces cometes errores de juicio pero en términos generales eres bueno y siempre protejerás a tu tripulación de cualquier daño.


Como ya es costumbre, el cuestionario está en inglés y la traducción del resultado que aparece aquí es obra mía.

Este test lo encontré gracias a que mi buen amigo Paco Espinosa lo contestó y publicó sus resultados en el blog de Comic Conexión, programa de radio vía web del cual es co-conductor y sobre el que ya escribí un poco hace algún tiempo. Curiosamente, Paco obtuvo el mismo resultado, es decir, el Capitan Malcolm Reynolds. Sin embargo, considero digno de mencionar que mi grado de afinidad con este personaje fue mayor al suyo, pues obtuve un 80% contra su 75%...   :-P

diciembre 21, 2007

Otra de religión

Hace algunos días tuve una breve conversación con mi primo donde afloró el tema de la religión. En alguna parte hallé un enlace a una página autodenominada como el God's Official FAQ (Frequently Asked Questions = Preguntas más Frecuentes). Ese sitio lo encontré hace algún tiempo gracias a mi buen amigo Mytho y se trata de algo bastante simple, pues solo tiene una pregunta con su respuesta:
¿Existe Dios?
No
Y acto seguido viene un texto invitando a remitir al sitio cualquier posible corrección y/u omisión, la cual será sometida a un concienzudo análisis razonado y de ser necesario se realizarán las actualizaciones o correcciones necesarias. Obvia decir que es virtualmente imposible que alguien presente evidencia clara y razonable que lleve a la corrección del contenido del FAQ, pero eso es lo de menos.

El caso es que le comenté sobre el sitio a mi primo, quien es católico y creyente (al menos cuando le conviene, como la gran mayoría de los creyentes que conozco) se mostró entre divertido, preocupado, contrariado y ofendido, y no necesariamente en ese orden. El caso es que intentó refutar la afirmación del sitio de una manera tradicionalmente dogmática, preguntándome, "Y si no existe Dios, ¿Qué impide que todos esos ateos y no creyentes anden por ahí robando y matando gente?"

Lo cual puede parecer una pregunta válida pero igualmente inocente y ociosa, pues implica que solo la continua existencia de Dios impide que el ser humano se entregue a sus más bajos instintos y de rienda suelta a la bestia que lleva por dentro y que solo es mantenida a raya por gracia del Señor. Mi respuesta lo desarmó y dio fin a nuestra breve conversación. "¿No te parece tonto pensar que cualquier persona, por el solo hecho de no creer en Dios ni seguir una doctrina religiosa, automáticamente debe ser una mala persona? Yo no creo en TU Dios, y no por eso soy una bestia sin ética moral o principios. ¿Cómo explicas que si TU Dios es omnipotente y omnipresente no haga algo para corregir la situación y meter a todos en cintura?"

Me miró sin saber que responder, se encogió de hombros y se fue. Y eso me puso a pensar otra vez en mi postura ante la religión. Nunca me ha convencido del todo el uso del término "ateo", porque la mayoría de la gente aún lo interpreta como "quien no cree en nada", aún a pesar de que su significado oficial es "quien niega la existencia de Dios". Personalmente considero que mi postura oscila entre el ateísmo, el agnosticismo y el satanismo. Esta última postura suele prestarse a malinterpretaciones porque mucha gente asocia satanismo=Satán=el Diablo, aunque no tenga nada que ver. El satanismo consiste en rendir culto a uno mismo, poniendo al individuo por encima de todo y buscando el crecimiento personal sin basarse en ninguna fe o creencia externa. La razón por la que no me termina de convencer del todo es el tinte narcisista y egoísta que lleva implícito.

Mencino el agnosticismo porque nunca me he cerrado a la posibilidad de que exista algo más, pero me parece ocioso tratar de entender o conceptualizar algo que, si existe, nos rebasa por completo y para fines prácticos debiera resultarnos incomprensible, y me parece una estupidez tratar de definirlo a través de la creación de una iglesia o religión sin importar las características que esta tenga. Volviendo a la respuesta de mi primo, creo justo aceptar el papel que la religión puede tener en la educación sentando las bases de una moral, pero ello no implica que sea el único modo de conseguirlo. A fin de cuentas, es necesario recordar que la gran mayoría de las guerras y conflictos en la historia de la humanidad fueron iniciados a partir de temas religiosos.

Me pregunto porque siempre termino discutiendo esto con alguien justo en esta época del año...

diciembre 18, 2007

NFL: Records y marcas

Faltan solo dos semanas para que termine la temporada regular de la NFL y el panorama de playoffs es cada día más claro, con 7 de las 8 divisiones ya decididas y con la Conferencia Americana prácticamente definida por completo.

Los Patriotas de Nueva Inglaterra se convirtieron este domingo en el segundo equipo de la historia en conseguir un récord de 14 ganados y 0 perdidos en temporada regular. El único otro equipo que alcanzó esa marca fueron los Delfines de Miami en 1972, año en que terminaron invictos. La principal diferencia es que en aquel entonces la temporada regular solo comprendía 14 partidos, en tanto que actualmente son 16. Nueva Inglaterra podría convertirse en el primer equipo en lograr la victoria número 15 en temporada regular y lo haría precisamente contra los Delfines de Miami. En caso de conseguirlo estarían a solo un juego más de conseguir terminar la temporada regular de manera invicta, necesitando para ello derrotar a los Gigantes de Nueva York el próximo 29 de diciembre.

Además del record de ganados y perdidos, los Patriotas persiguen algunos otros records tanto como equipo como de manera individual. Pueden lograr aún los records de mayor diferencia de puntos y mayor cantidad de puntos totales, mientras que Tom Brady necesita tirar 4 pases de anotación para alcanzar la marca de Peyton Manning de 49 en una temporada, o 5 para superarlo. Randy Moss tiene 19 recepciones de touchdown, 3 menos de las 22 que marcan el récord de Jerry Rice. Faltando aún dos partidos por disputar y siendo uno de ellos contra el débil equipo de los Delfines es bastante razonable pensar que lograrán conquistar esas marcas.

Brett Favre ha dedicado toda esta temporada a apoderarse de cuanto record para mariscal de campo existían, especialmente aquellos que pertenecían a Dan Marino. Favre es ahora el líder de todos los tiempos en pases lanzados, pases completados, pases de anotación, yardas ganadas por pase, partidos consecutivos jugando como titular, e incluso pases interceptados. Favre es el líder del equipo más joven de la liga, y bajo su comando los Empacadores de Green Bay se perfilan como uno de los posibles contendientes a representar a la Conferencia Nacional en el SuperBowl XLII, y mientras tanto se dedica a sumarle a sus estadísticas, estableciendo un nuevo record cada vez que sale al terreno de juego.

Muchos otros records históricos han caído durante esta temporada. LaDainian Tomlison sigue camino a ser uno de los más grandes corredores de la historia de la liga. Marvin Harrison, con todo y sus lesiones, y Isaac Bruce empiezan a escalar posiciones entre los grandes receptores de todos los tiempos.

Devin Hester encabeza la más grande camada de regresadores de patada que se hayan visto jamás en la liga, y en un año donde se han regresado para anotación más patadas que en ninguna otra temporada, incluso los Bucaneros de Tampa Bay, que jamás habían anotado en un regreso de patada de salida, lo han conseguido.

El clima de fin de año puede no ser el más propicio para jugar y algunos de los equipos con ataques aéreos espectaculares se han visto afectados por la lluvia, el viento y la nieve, pero la necesidad de superar a los rivales ante toda clase de adversidades es un aliciente extra para demostrar la capacidad de los grandes equipos. Sin duda nos quedan dos semanas de juegos donde aún habrá en juego posiciones en la tabla, records, y sobre todo amor propio y orgullo. Sin duda será un digno previo para los playoffs y el SuperBowl.

diciembre 17, 2007

30 Days of Night

Hace algunos días escribí sobre la... peculiar... experiencia que vivimos mi hermano y yo al ir a ver 30 Days of Night, pero no comenté nada sobre la película en si. 30 Days of Night está basada en la miniserie de comics/novela gráfica del mismo título escrita por Steve Niles e ilustrada por Ben Templesmith que cuenta la historia de como un grupo de vampiros decide convertir al poblado de Barrow, Alaska, en su sitio de cacería por un mes aprovechando que durante el invierno hay un periodo de treinta días en que el sol no aparece en esa población.

Un detalle curioso y poco conocido es que 30 Days... fue una historia originalmente concebida para el cine. Niles le presentó la idea y un esbozo del guión a varios estudios y productores pero nadie se interesó en llevarla a la pantalla. Unos años más tarde, mientras Niles buscaba hacerse de una carrera dentro de la industria del comic al tiempo que hallaba un modo de pagar las cuentas, IDW Publishing lo contactó para saber si tenía alguna historia archivada que pudiera servir para engrosar la línea de publicaciones de la naciente editorial. Niles les envió descripciones de varios proyectos descartados, olvidados y/o abandonados y el que más agradó a los editores fue 30 Days of Night. Desde su publicación han aparecido varias secuelas y proyectos relacionados y Niles goza ya de cierta reputación en el poco explotado (al menos en los comics) género de terror.

La película es una adaptación bastante fiel del comic, cambiando únicamente algunos detalles de la historia, principalmente los concernientes a la participación de Vicente, el líder de los vampiros, en los hechos narrados. Josh Hartnett en el papel de Eben Oleson (Olemaun en el comic) es el sheriff de Barrow, y por tanto recae en sus manos la responsabilidad de investigar y enfrentar la siniestra amenaza que se cierne sobre el pueblo. Por si eso no fuese suficiente para mantenerlo ocupado, Eben tiene que lidiar con lo que queda de su relación con su aún esposa Stella (Melissa George), atrapada en el pueblo pese a sus esfuerzos por abandonarlo antes de la larga noche.

A pesar de que toda la película transcurre durante la noche, no se trata de una película tan oscura como se podría llegar a creer. La nieve que cubre todo ayuda a crear un contraste visual muy atractivo entre la oscuridad y la nieve, mismo que resalta aún más cuando empieza a correr la sangre. Tal vez lo único que le faltó a esta película para poder compararse con algunos clásicos de vampiros como Near Dark o The Lost Boys fue trabajar un poco más en el desarrollo de los personajes, pues fuera del papel de Eben ninguno de ellos alcanza a ser explorado adecuadamente, quedando incluso en el aire la resolució, o al menos explicación, de las complicaciones maritales de Eben y Stella.

Interesante sin llegar a ser cautivadora, entretenida e inventiva la mayor parte del tiempo con solo un ligero bajón de ritmo alrededor de la mitad, 30 Days of Night resulta una muy entretenida película de vampiros, cosa que hacía algún tiempo no se veía en las pantallas de cine. Recomendada para todos los aficionados del subgénero o para quienquiera que busque dos horas de esparcimiento escapista sin muchas pretensiones.

diciembre 14, 2007

Dream Theater

Ahora que mencionaba las formas extrañas en que puedo decidir probar o comprar las cosas, recordé que también fue de manera curiosa que descubrí a Dream Theater.

En 1995 abrió sus puertas en México Columbia House, un servicio de venta de CDs por catálogo. Creo que me llegó una invitación por correo y funcionaba a base de paquetes de 3, 5, 7 o 9 discos, y entre más grande fuese el paquete más baratos resultaban los discos. Recuerdo que durante la temporada navideña era bastante útil para cumplir con algunos compromisos en cuestión de regalos, y que en ese primer año, para completar un paquete grande necesitaba añadir un disco más.

En la sección de Hard Rock/Heavy Metal del catálogo había dos discos de Dream Theater, Image and Words y Awake. La descripción decía algo así como "banda de virtuosos ejecutantes que combinan rock progresivo y heavy metal". Y me enganchó. Decidí pedir uno de los dos discos para ver que tal sonaba y puse el otro en la lista de opciones para reemplazar cualquier disco que pudiese estar agotado. Cuando llegó mi pedido venían los dos discos mencionados.

A la fecha no me arrepiento, pues DT sigue siendo una de mis bandas preferidas. Sé que el progresivo no es precisamente para todos los gustos, pero creo que haber pasado buena parte de mi adolescencia escuchando la colección de música del hermano mayor de uno de mis mejores amigos tenía que haber dejado alguna secuela, pues nadie más de mi edad disfrutaba los discos de Pink Floyd, King Crimson o Genesis (aclaro, de la era de Peter Gabriel) como nosotros, pero siempre he sido de la idea de que Dream Theater tiende a cargarse un poco más en dirección al Metal que al Progresivo, género del que toman principalmente la idea de desarrollar albumes conceptuales.

Ambos discos me gustaron bastante, pero el Image and Words sigue siendo mi favorito después de todos estos años. Al pasar del tiempo descubrí que el grupo existe desde 1985 pero que fue hasta 1992, precisamente con el Images and Words que el grupo ganó notoriedad y empezó a desarrollar un fiel grupo de seguidores. Se han presentado en México con un éxito aceptable en un par de ocasiones y al asistir a cualquiera de sus conciertos sirve para constatar el elevado nivel técnico de ejecución que poseen. Los miembros del grupo tienen amistad con miemboros de otras bandas, lo que permite que en ocasiones aparezcan como invitados en discos de otros artistas. John Petrucci, el guitarrista, es uno de los miembros recurrentes del grupo itinerante y de alineación rotante G3, integrado por guitarristas reconocidos, como Joe Satriani, Steve Vai, Eric Johnson o Yngwie Malmsteen, quienes se presentan de 3 en 3 (de ahí el nombre).

Este es el video de Pull Me Under, tema con que abre el Images and Words y primera canción que escuché del grupo.


diciembre 13, 2007

The Prisoner

Este libro lo puedo sumar a la larga lista de cosas que he comprado sin tener una justificación razonable. Al menos en principio. Se trata de una novela publicada originalmente en 1969 que está basada en una popular serie de televisión británica de la década de los 60s. Jamás he visto un episodio de esta serie, y de acuerdo con varias personas de mayor edad a quienes consulté al respecto, es muy probable que jamás haya sido transmitida en México. Entonces, ¿por qué la compré?

Cuando la vi en el Previews, catálogo de nuevos lanzamientos de Diamond Comics Distribution, el más grande distribuidor de comics y libros para tiendas de comics, lo que me llamó primero la atención fue el autor, Thomas M. Disch, reconocido escritor de ciencia ficción, horror y poesía, de quien había leído con anterioridad Camp Concentration (Campo de Concentración), The Genocides (Los Genocidas) y The Bussiness Man (El Ejecutivo), además de haber visto hace algunos años la adaptación en dibujos animados de su novela infantil The Brave Little Toaster (La Tostadorcita Valiente), así que estaba familiarizado con su trabajo, que nunca me ha decepcionado. Un amigo, quien vivió en los Estados Unidos durante buena parte de los 80s, me comentó que la serie era muy buena y que él había oído buenas críticas de la novela. Sumado eso a que la premisa me pareció interesante, decidí encargarlo. Eso fue hace algunos años ya, y sin embargo lo leí apenas hace un par de semanas.

Un agente secreto decide renunciar a su trabajo, pero sus jefes deciden que posee demasiada información sobre temas sensibles como para dejarlo suelto así que hacen lo único sensato fuera de matarlo: encerrarlo en una prisión. Pero no se trata de cualquier prisión. La Aldea es un pequeño poblado a la orilla del mar que parece estar hecho a partir de postales de sitios de descanso tradicionales en Europa. La Aldea está poblada únicamente por espías, ex-espías, y demás agentes gubernamentales, algunos de ellos prisioneros y otros parte del sistema de vigilancia, ya sea de manera voluntaria o víctimas de algún chantaje o presión. En La Aldea nadie tiene nombre, así que cada uno de sus habitantes es identificado por un número, siendo el 6 el asignado al protagonista de la historia.

La novela sigue a Número 6 desde la noche anterior a su captura y confinamiento a La Aldea y cuenta sus continuos esfuerzos por escapar del lugar a pesar de la continua vigilancia a que es sometido. Aparentemente el lugar es manejado por Número 2, un hombre de edad madura a quien Número 6 solo ve en una pantalla que aparece frente a una de las ventanas de su casa. 2 es un aficionado a la poesía y a la filosofía, lo que resulta en algunas entretenidas conversaciones entre él y Número 6 sobre la naturaleza de las prisiones y la similitud que existe entre prisioneros y carceleros, creando algunas memorables escenas que contribuyen a crear un interesante trasfondo para la novela, elevándola más allá de cualquier historia de espionaje e intriga convencional.

Disch tiene una narrativa muy limpia y suele ser directo a la hora de narrar cualquier situación, pero sus diálogos suelen ser la clave para evitar que su trabajo resulte excesivamente simple. Siendo él mismo aficionado a la poesía y a la literatura dramática, no es de sorprender que las conversaciones entre 2 y 6 tengan tanto peso en el desarrollo de los personajes y enriquezcan el mundo en que viven. The Prisoner resultó una muy agradable sorpresa, siendo una de esas novelas que además de entretener lleva a la reflexión, planteando toda clase de interrogantes sobre el mundo en que vivimos y la forma en que está estructurada la sociedad occidental. Incluso me ha hecho considerar la posibilidad de adquirir la serie de televisión, misma que fue editada en DVD el año pasado, así que no debiera ser difícil de conseguir.

diciembre 12, 2007

Hitman

Si hay un medio que al servir como fuente para adaptaciones cinematográficas ha sufrido toda clase de vejaciones y desprecios -incluso más que los comics-, sin duda se trata de los videojuegos. Se podría decir que a la fecha la única película basada en un videojuego que salió bien librada de la mayoría de las críticas tanto de fans como de críticos profesionales sin importar el grado de familiaridad con el juego, sería Silent Hill, con todo y que también fue duramente criticada en su momento.

Hitman no ayuda en nada a cambiar la percepción de que los videojuegos no tienen una historia que aportar a ningún medio narrativo. Skip Woods, el guionista de esta película, es también el autor del guión de Swordfish, cinta que cuenta con una trama suficientemente compleja como para retener la atención de la audiencia pero a la vez suficientemente liviana y accesible como para no arriesgarse a convertir en thriller o drama una película que descaradamente se deja ubicar en los géneros de acción y aventura. Lamentablemente Hitman no tiene ese mismo balance y falla en decidir que clase de historia es. La premisa es bastante floja en su construcción: el mejor asesino del mundo es traicionado por la organización que lo creó y para la cual trabaja, y ahora tiene que evadir a otros asesinos mientras busca descubrir porque hay un precio sobre su cabeza.

Lo cual no se oye tan mal de no ser porque nunca investiga nada, no se vuelve contra sus antiguos empleadores ni persigue a los responsables de ponerle precio a su cabeza... y para tratarse de un grupo de asesinos tan letales y altamente eficientes ni siquiera tiene que esforzarse demasiado para seguir con vida. En vez de eso dedica su tiempo a crear un inverosímil lazo afectivo con una joven prostituta que debiese haber sido una víctima colateral del complot en su contra. Y digo inverosímil debido a que ni tiene razón de ser ni es explotado adecuadamente. No existe una atracción física y/o sexual (al menos no de manera mutua) ni motivos para creer que se pueda desarrollar cierto grado de empatía entre ellos. Pareciera que lo único que los une y se convierte en el factor de simpatía es un tatuaje, aunque tampoco entiendo como asociar un código de barras en la nuca con un dragón en el pómulo.

Timothy Olyphant interpreta al Agente 47, el asesino titular de la cinta. Su actuación no es mala, pero es evidente que no tenía mucho con que trabajar. En la primera escena vemos lo difícil que resulta para él intentar socializar cuando una mujer desconocida trata de coquetear con él. Sin embargo, podemos ver una secuencia de un par de minutos donde pasea en medio de un mercado público conversando animadamente con Nika, la prostituta rusa mencionada anteriormente y quien es interpretada por Olga Kurylenko, aunque lo hacen alejados de los micrófonos y no podemos siquiera tratar de imaginar algún tema de conversación. La presencia de Nika en la historia no se justifica jamás. Pareciera que Woods y Xavier Gens, el director, la incluyeron porque se convertía en una excusa para que el Agente 47 actuara fuera de personaje, además de poder recurrir a un desnudo gratuito si sienten que la atención de los expectadores puede estarse desviando hacia la decoración de la sala -como eventualmente sucederá-. Dougray Scott interpreta a Mike Whittier, un inspector de la Interpol que ha perseguido durante tres años a 47, aunque jamás nos explican como puede estar seguro de ello si nunca encuentra rastros y sabemos que existen otros asesinos con el mismo entrenamiento. Pero debemos aceptarlo, al igual que el hecho de que después de este tiempo el inspector ya siente que lo conoce y se refiere a él constantemente como "mi muchacho".

Visualmente la película no tiene mayor problema, pues las explosiones y balaceras se han convertido en algo tan rutinario que el éxito de una escena depende mayormente del montaje y coreografía de la misma, y aquí están aceptablemente diseñadas, a excepción de un par de momentos en que el director de fotografía parece haber decidido hacer algunos experimentos con la cámara borracha y los cambios repentinos de velocidad y filtros. Las secuencias de destrucción aleatoria de propiedad ajena también son rutinarias, excepto por la que destruye el interior de un cuarto de hotel y parte del pasillo aledaño, pero convenientemente deja intactas una maleta con equipo y una computadora portátil, mismas que ni siquiera se convierten en objeto de disputa entre las diferentes fuerzas policiales involucradas.

En conclusión, Hitman es una película estrictamente palomera y ni siquiera como primera opción, debiendo ser considerada solo si no hay otra película disponible. Para mayor referencia tal vez resulte prudente señalar que no alcanza el nivel de entretenimiento que cintas como Ghost Rider, XXX, Torque o Smokin' Aces representan.

diciembre 10, 2007

Cines de tercer mundo

El día de ayer fui con mi hermano a ver 30 Days of Night, la película de vampiros basada en la novela gráfica del mismo nombre creada por Steve Niles y Ben Templesmith que se estrenó en México la semana pasada. Para ello acudimos al centro comercial Plaza Oriente, donde hay un complejo de salas de Cinemark, no porque sea nuestro lugar favorito o represente la mejor opción entre las diferentes cadenas de salas de exhibición, sino porque está cerca de casa y porque la zona aledaña al mencionado centro comercial nos ofrece muchas opciones para almorzar saliendo del cine.

En varias ocasiones hemos tenido disgustos menores con el servicio ofrecido en ese complejo de cines, principalmente por la falta de puntualidad para empezar la proyección de las películas o por la falta de personal en taquillas cuando hay estrenos de gran demanda, pero lo de ayer fue algo completamente inesperado.

Desde que empezaron los avances de los próximos estrenos era evidente que algo estaba mal con el sonido, pues se oía sucio, entrecortado, y a muy bajo volumen. Normalmente no es algo que me cause ningún conflicto porque se supone que el bloque de comerciales y avances es usado precisamente para poder corregir cualquier problema que pudiese haber, pero en esta ocasión no fue así, porque una vez iniciada la película el problema persistía.

Durante la primera media hora de la película el sonido fue espantoso. El volumen subía, bajaba, desaparecía, o tronaba mucho. Pero cuando finalmente se corrigió el problema con el audio la cosa se puso peor aún. Antes del empiezo de los comerciales y avances la pantalla es usada para proyectar una serie de anuncios publicitarios y autopromos de Cinemark, los cuales van intercalados con algunas preguntas de trivia. Para ello se utiliza un proyector independiente del cinematográfico, el cual es visible debajo de la ventana de la caseta del proyector. Pues resulta que por alguna razón ese proyector se encendió, resultando en una superposición de los anuncios y trivias encima de la película.

Esto pudiese no haber sido tan grave si lo hubiesen apagado inmediatamente, pero esta incómoda situación se prolongó por más de diez minutos. Una vez apagaron ese proyector el resto de la película transcurrió sin contratiempos. Al final lo que más me llamó la atención fue que ninguno de los asistentes parecía molesto por lo que ocurrió. Cierto, había poca gente en la sala (otra razón por la que nos gusta visitar ese complejo los domingos por la mañana), pero aparte de mi hermano y yo nadie hizo el más mínimo intento por presentar una queja. ¿Así o más dejados y conformistas?

En lugar de abandonar la sala por la puerta trasera, a donde siempre dirigen a todo mundo, solicitamos salir por el frente para hablar con el gerente. Una vez nos atendió la señora y le explicamos cual era el problema se disculpó y nos ofreció un par de pases de cortesía para cualquier función. Esto me parece lo mínimo que pueden hacer en casos como el nuestro, pero me parece que debería haber mostrado una mayor preocupación por lo sucedido que simplemente menear la cabeza y decir "no nos dimos cuenta". Si pertenece a una empresa que tiene el pomposo y pretencioso slogan de Lo Mejor en Cines, el personal debería hacer su mejor esfuerzo por ayudar a hacerlo realidad.

Tal vez muchos consideren que se trató de algo demasiado extraño para haber sido cierto, pero tenemos un par de pruebas. Además de las poco claras fotografías que aparecen más arriba, mi hermano grabó con su celular un poco de video de lo que sucedió, el cual pueden ver a continuación gracias a YouTube.


diciembre 06, 2007

Winter Passing

Esta debe ser la forma más curiosa en que he visto una película para reseñar: en el hospital y sin estar enfermo. Hace un par de semanas acudí al Hospital ABC a donar plaquetas para Bachan, y como se trata de un proceso de poco más de dos horas y gracias a que la tele estaba sintonizada en Movie City, pude ver el final de Inside Man y la totalidad de la película que empezó después: Winter Passing.

Reese Holden (Zoey Deschannel) es una joven aspirante a actriz que busca una carrera en la difícil escena teatral neoyorquina. Reese es hija de dos famosos escritores, y cuando muere su madre recibe una visita de una editora con una oferta bastante generosa si es que puede hacerse con una serie de cartas escritas por su madre. Reese duda sobre que hacer porque hace años que no ve a su padre y ni siquiera se presentó al funeral de su madre, pero la cantidad que le ofrecen es buena y su vida no está precisamente en el mejor de sus momentos, así que decide ir a casa a buscar las cartas.

Al llegar a casa de su padre, Don Holden (Ed Harris), lo encuentra convertido en un ermitaño que dejó definitivamente la vida académica -daba clases en una escuela local- y no sale de casa bajo ninguna circunstancia. Con él viven Shelly (Amelia Warner), una ex-alumna a quien Don dio refugio en un momento de necesidad y quien ahora se ha convertido en su secretaria/asistente/ama de llaves; y Corbit (Will Ferrell), un extraño individuo que llegó un día y nunca más se fue. Entre Shelly y Corbit se encargan de atender y proteger a Don, lo que provoca la inmediata desconfianza o quizás envidia y celos- de Reese.

Winter Passing es un drama familiar que bajo el pretencioso slogan "A veces, al buscar lo que quieres encuentras lo que necesitas", cuenta como Reese busca lidiar con las huellas de una infancia donde, según sus propias palabras, tenía que competir con un par de máquinas de escribir por la atención de sus padres. Conforme la historia progresa poco a poco se van reparando los lazos de comunicación y afecto entre Don y Reese, mientras ella empieza a aceptar la compañía de sus inusuales inquilinos/asistentes. Lamentablemente el guión nunca ahonda lo suficiente en sus personajes como para que la película resulte verdaderamente memorable, pero el resultado es bastante agradable.

Lo que realmente mantiene a flote a la película e impide que se hunda en el pantano de los dramas independientes genéricos son las actuaciones de Zoey Deschannel y Ed Harris. Zoey consigue que Reese se convierta en parte de ella misma y canaliza perfectamente toda la ira y el resentimiento que lleva dentro. Por mucho las mejores líneas de toda la película son las suyas cada vez que hace un comentario sarcástico y/o hiriente, en parte por como están escritas y en parte por la manera en que las entrega. Ed Harris hace algún tiempo que se ha convertido en uno de los actores de caracter más capaces, y su interpretación del atormentado autor capaz de crear mundos con las puntas de sus dedos pero inútil cuando de mantener unido un hogar se trata es uno de sus trabajos más sobresalientes en mucho tiempo.

Lo disparejo y/o limitado del guión se hace evidente con los personajes de Corbit y Shelly. Shelly nos es presentada como una intrusa en los restos de la familia Holden. Para Reese representa una rival, una especie de hija sustituta que está cumpliendo algunas de las funciones que por naturaleza y derecho debieran ser suyas. Aún cuando se le dan diálogos pensados para ayudar a entender al personaje y conocer más acerca de su pasado, se sigue sintiendo plano y sin profundidad, resultando completamente irrelevante cuando no está en escena para dar pie a los diálogos de Reese. Con Will Ferrell es aún más marcado el pobre trabajo de desarrollo del personaje de parte del guionista, pues cada ocasión en que se busca que parezca fuera de lugar para crear diversas situaciones, desde comic relief hasta simple y llanamente absurdo, se sienten forzadas y mal planeadas, por lo que Ferrell nunca llega a ser ni divertido ni entrañable.

Concluyendo, Winter Passing es un drama contemporáneo elevado de la mediocridad por el excelente trabajo actoral, donde Zoey Deschannel se convierte en la mejor razón para ver esta película.

diciembre 05, 2007

Hijos de Hombres

Hace unos meses, buscando un regalo en una librería, me encontré en el pasillo dedicado a la ciencia ficción, lo cual no tendría nada de raro de no ser porque se trataba de una librería que visitaba por primera vez. Aprovechando que me encontraba ahí le di un rápido vistazo a los estantes y me encontré con algunos buenos libros a muy buen precio, entre ellos la edición en español de Children of Men publicada por Ediciones B bajo su sello Zeta Bolsillo. Phyllis Dorothy James, mejor conocida como PD James, es una escritora británica reconocida por su trabajo dentro de los géneros policiaco y de misterio, pero desde el año pasado su nombre se ha visto intimamente ligado a otro sub-género literario, como es la ciencia ficción, mayormente debido al fuerte impacto mediático que causó la adaptación cinematográfica de Children of Men realizada por el mexicano Alfonso Cuarón. El libro y la película difieren en varios aspectos de la trama, pero no en los temas. En su momento escribí mi comentario acerca de la película
, así que ahora me concentraré en el libro.

La humanidad ha quedado esteril, y a veinticinco años del último nacimiento registrado la desesperanza se ha ido apoderando de los sobrevivientes. Inglaterra parece ser el último bastión de la civilización y también se encuentra en una precaria situación. Theo Faron, un profesor de la Universidad de Oxford, cumple cincuenta años el mismo día que el hombre más joven del mundo muere asesinado en Buenos Aires, Argentina, y ya sea por esta razón o por cualquier otra decide empezar a escribir un diario. A través de lo que Theo va escribiendo en el diario nos podemos ir creando una imagen de el mundo en que vive.

El caos reina por todos lados, salvo en Inglaterra, donde Xan, un primo de Theo, decidió proclamarse como Guardián de Inglaterra y hacerse cargo del gobierno apoyado por un Consejo de cinco miembros que se encarga de mantener el orden en el país. En algún momento Theo fue parte de ese Consejo y muchos lo consideraban como la persona más cercana al Guardián, pero años atrás decidió hacerse a un lado y volver a la vida académica. La visibilidad que le otorga su parentesco con el Guardián provoca que sea contactado por un grupo de "jóvenes" (término aparentemente usado para referirse a quienquiera que tenga menos de 40 años) de ideas revolucionarias que esperan convencerlo de interceder ante su primo para lograr algunos cambios en el manejo del país. De manera reluctante y poco comprometida Theo acepta verificar algunas de las afirmaciones hechas por el grupo y de considerarlo pertinente solicitar una audiencia con su primo. Tras asistir a un suicidio colectivo que tiene pintas de todo excepto voluntario, Theo decide hablar con el Guardián, aunque con poco éxito. Su contacto con el grupo de presuntos revolucionarios altera visiblemente la visión que Theo tenía de muchas cosas y afecta el contenido de su diario. La revelación de que una de las mujeres del grupo está embarazada será suficiente para hacerlo abandonar la comodidad de su casa con todas las ventajas y seguridad que ésta representaba, convirtiéndose en un fugitivo que intenta de huir de un gobierno omnipresente y todopoderoso, motivado por las dos fuerzas más grandes que pueda haber, el amor y la esperanza.

La característica más distintiva del trabajo de James es su majejo de personajes. Aún cuando Children of Men es una novela de ciencia ficción, el mundo futuro que nos muestra no está lleno de adelantos tecnológicos o manifestaciones científicamente avanzadas. Es un mundo en el que podríamos estar viviendo en un año, o en cinco o diez, y precisamente eso es lo que dota a la novela de una inusual capacidad para causar escalofríos en el lector. James teje su historia a partir de los personajes, dándoles una voz y personalidad propias para luego colocarlos en un entorno extraño e ir recogiendo sus reacciones e impresiones. Objetivamente hablando hay que decir que no se trata de un trabajo innovador o diferente, pues los ecos de Orwell, Huxley y Ballard son estruendosos en algunos aspectos de la novela, pero en términos generales y por méritos propios me parece que se trata de una muy buena novela.

Personalmente creo que Cuarón hizo un extraordinario trabajo disectando la novela para tomar los temas que explora y trasladarlos a la pantalla de una forma más compleja y completa, respetando la esencia del material de origen pero alterando la forma en que la expresa. Eso es algo que comentaré en otro texto en unos días más, porque me parece demasiado interesante como para dejarlo de lado y no quisiera extender de más este texto, pues entiendo que a varios de mis escasos lectores les parece que a veces me desboco sin control.

Hasta entonces.